Antonio Caselli, ex candidato a presidente de River, le hizo una corrección a las declaraciones de Daniel Passarella, que busca devolver al club a la Primera División. Acompañó la declaración con un categórico "Si se hubiera dejado ayudar, hoy no estaríamos en la B. Él pensó que podía solo y se dio cuenta que no, tarde pero se dio cuenta".
El líder de "Primero River" dialogó con Los Más Grandes, de Radio Cooperativa y comenzó "Lo quise ayudar desde el primer día, pero siempre me encontré con una pared. En la época de Davicce, el club no tenía plata para construir los palcos de la Belgrano, yo lo ayudé y hoy los palcos están. Passarella no entiende que yo siempre voy a querer ayudar a River, porque siempre le voy a tender una mano al club que amo. Hace 15 días nos tildó como la peor oposición de la historia. Pero se olvidó que apenas asumió, le ofrecí un crédito de 100 millones de pesos, con una tasa de un 10 por ciento anual no variable en pesos"
Según la nota que realiza PlayFutbol.com "En su momento, le ofrecí a Bolatti y eligió traer a Rojas. Le acerqué a Cvitanich y el prefirió traer a Canales, que le salió más caro. A mitad de año le acerqué a Lugano y me dijo que tenía un central paraguayo que lo hacía acordar mucho a él, que entraba al área en puntas de pie. Ese central era Adalberto Román. Fracasar no es no ascender, fracasar es descender. Hay que enmendar esto que daña la historia de River".
"Si Trezeguet está en un 60 por ciento, va ser una gran incorporación y lo aplaudo al presidente, pero hay que ver cómo está físicamente. Lo que no entiendo porque fuimos a buscar a Ponzio, que ya nos había costado cinco millones de dólares y ahora tuvimos que pagarle un millón más. Hace exactamente un año le decía al presidente que no podía traer sólo a Bordagaray y darle la responsabilidad a los más chicos de afrontar el semestre más importante de la historia. Ahora, llegó Trezeguet y es bienvenida la experiencia que tiene".
Fracasar es no haber intentado jugar como la historia de River indica, y en eso fracasaron los jugadores, los técnicos, los dirigentes, los hinchas, y este muchacho que no ganó las elecciones.
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