El Masters 1000 de Roma se quedó sin los últimos representantes de nuestro país, que lograron llegar hasta la llave de los dieciséis mejores para caer contra diferentes rivales y en distintas circunstancias.
Finalmente las canchas del Foro Itálico se quedaron sin presencia argentina, en su mayoría eliminada al inicio de la competencia. El polvo de ladrillo romano albergó las derrotas de David Nalbandian, en segunda ronda ante Andy Murray; Carlos Berlocq, en la misma fase que el unquillense pero contra Roger Federer; y Juan Ignacio Chela, durante la ronda inicial y frente a Radek Stepanek. Juan Martín del Potro y Juan Mónaco eran los que habían continuado, junto a las doblistas Gisela Dulko y Paola Suárez, aunque ayer todos resultaron vencidos en octavos.
El contrincante de la "Torre" de Tandil fue el francés Jo-Wilfried Tsonga, número cinco del planeta, quien se hizo del juego por 6-4 y 6-1. Del Potro había comenzado muy bien el encuentro, gracias a un quiebre que lo puso 3-2 arriba. Sin embargo cedió su saque enseguida, y el europeo no perdonó, ayudado además por errores del argentino. Así fue que el segundo set encontró un aparente cansancio en el alto tenista nacional, probablemente originado a partir de sus participaciones en Estoril y Madrid, y el francés cerró el pleito.
Para Mónaco la suerte había deparado lo peor: el serbio Novak Djokovic, actual primer puesto del ranking ATP. De todas formas, el tandilense se impuso en la primera manga, antes de que su oponente se recuperara y ganara por 4-6, 6-2 y 6-3. De hecho Djokovic llegó a romper su raqueta, como símbolo de su enojo debido a ese primer set. El argentino, quien cayó en todas sus presentaciones (6) ante el serbio, reconoció, no sin razón, que esta era la vez que más cerca había estado de superarlo.
El caso de Dulko y Suárez determinó una derrota frente a las italianas Sara Errani y Roberta Vinci, por 3-6 y 4-6, pareja con que las argentinas siempre cayeron cada vez que chocaron en este año. No obstante no ha sido una mala temporada de las doblistas, al haber alcanzado las semifinales en Monterrey, Acapulco, Miami y Stuttgart, y los cuartos en Indian Wells y Madrid. En total son ocho los certámenes que disputaron juntas, de cara a la añorada clasificación a los Juegos Olímpicos de Londres, en busca de una medalla.
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