sábado, 5 de marzo de 2011

Figurita repetida

Estudiantes se quedó con el clásico platense. Derrotó por 2-0 a Gimnasia de visitante en el Estadio Único. Los goles lo marcaron Gastón Fernández y Enzo Pérez de penal.

Gran expectativa en toda la ciudad por este partido. Varios condimentos detallamos en Rockandgoleros en la semana. Lo que generaba el lujoso Único para los 2 equipos. Sensaciones diferentes para ambos planteles. Por un lado Estudiantes que ha adoptado como su casa la cancha de 25 y 32. Y por otro lado Gimnasia que no le sienta bien este Estadio y quedó demostrado una vez más.

Pero vamos al cotejo. Lo vamos a separar en 2 partes. La primera es para Gimnasia que Salió desde el primer minuto mas decidido y con profundidad llevando peligro hacia el arco de Agustín Orión, sin embargo no pudo convertir a lo largo de los 45’ iniciales. No obstante, el trabajo del local era bueno. No dejaba jugar a la visita y tenia un gran crecimiento deportivo tanto en la defensa como en el ataque. Lo rápido y ágil pasaba por Juan Neira que una y otra vez le daba dolores de cabeza a la defensa albirroja. Lo cierto y real es que el lobo no pudo convertir y el 0 era hasta el momento mesquino.

La segunda parte pasó algo totalmente diferente. Como contra Olimpo en el Bosque, los de Cappa salieron dormidos al campo de juego y el pincha se dio cuenta de esto. El oficio, la jerarquía y hasta podemos decir la astucia de algunos jugadores rojos, le bastó a Estudiantes para llevarse una nueva victoria ante su eterno rival. A los 7’ llegaría el primer gol con un pelotazo de Leandro Desábato desde 45 metros que agarra mal parada la defensa tripera y la Gata Fernández enfrenta a Gastón Sessa para mandar la pelota a la red. Apartir de aquí cambiaron mucho las cosas. Los de Berizzo jugaron tranquilos a diferencia que el lobo que la intranquilidad terminó por liquidarlos. Más tarde otro pase largo del pincha para que Abel Masuero imprudentemente toque el esférico con la mano para que Baldassi cobre la pena máxima. Pérez fue el encargado de cambiarlo por gol y enmudecer toda la parcialidad albiazul.

Estudiantes en los últimos tramos de la jornada se apiadó del lobo. Leandro González tuvo 2 claras que desperdicio y entonces, como había resultado en el clásico anterior, el pincha no goleo al tripero por meritos propios.
Ganó el favorito, el que tenía que ganar. El conjunto que prácticamente se conoce de memoria demostró que aunque se hable y se diga cualquier cosa, puede sacar chapa de campeón para enfrentar estos partidos decisivos. La vereda del otro lado tendrá que mejorar y mucho. Esta bien decir que el pincha no lució, no bailó, pero al Mens Sana le quedan cosas por corregir que a esta altura del campeonato ya tendría que haber superado. Esta claro que en el Estadio Único no le va bien al lobo (sobre 9 jugados, el león ganó 7 y los restantes fueron empates). Perdió Gimnasia, ganó Estudiantes. Así terminó la edición número 149 del clásico de la ciudad.

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