Así le dijo Barcelona al Real Madrid luego de la victoria en el clásico por 5-0 en el Camp Nou ante la algarabía de los hinchas culé. La eficacia del equipo catalán fue letal, que dejó a 20 minutos de la finalización del cotejo sin ningún tipo de argumento de juego a los de Mourinho.
La primera del partido la tuvo Messi en sus pies, que quizo sorprender por detrás a Casillas con un tiro desde la derecha (adentro del área grande) y casi sin ángulo pateó pero la pelota dio contra el segundo caño vertical. Igual no pasó mucho tiempo cuando Iniesta, de gran partido, mando un centro al área que tras rebote en un defensor merengue, Xavi tuvo que empujarla para poner el 1-0.
Mas tarde y ante el desconcierto de la visita, que de a poco iba subiendo la temperatura, el “guaje” Villa encaró a la defensa y mandó centro para la llegada de Pedro que solo tuvo que empujar la pelota a la red en la arremetida. Las cosas estaban 2-0 y asi se iban al descanso.
Messi, que no convirtió goles se dedicó a meter asistencia y el que mejor lo entendió fue Villa que consiguió el tercer y cuarto gol, con el pleito liquidado entraron Bojan y el venezolano Jefren para darle un poco de frescura al avanze barcelonista. De hecho para redondear la goleada, el oriundo del país caribeño selló la victoria con un gol tras centro del otro canterano.
Para destacar la desazón y la calentura de los de la Casablanca, el mejor ejemplo fue el de Sergio Ramos ya que tuvo una mala noche el muchacho empujando a Puyol y Xavi, compañeros en la selección española y ser expulsado.
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