La noche lluviosa de Tigre fue más oscura para el lobo que no demuestra nada de fútbol, y lo peor que aun no ha marcado en el torneo. Esta vez cayó 2-0 en Victoria ante el matador que supo aprovechar las jugadas que tuvo y fue eficaz en las últimas líneas.
El partido se desarrolló con un solo equipo en la cancha. Sin dudas el local aprovechó las falencias del conjunto tripero manejando por momentos bien la pelota y los tiempos de juego.
El primer gol fue a los 29’ del primer tiempo con un exquisito remate de afuera del área de Castaño (figura del cotejo) que dejó sin reacción a Sessa. A partir de ahí el control perteneció al conjunto de Caruso Lombardi. Los de Cocca nunca entendieron en donde estaban, lo más claro fue Rinaudo y el resto deambulaba por el rectángulo deseando que termine los primeros 45.
En el segundo tiempo el azulgrana madrugó a Gimnasia a los 2’ con un centro al área que cabecea Telechea para poner cifras definitivas. La formación Mens Sana no pudo cambiar el rumbo mostrando una horrible presentación y una imagen inaceptable para el hincha tripero.
Lo cierto es que Martín Cocca no logra encontrar un conjunto colectivo, portador de buenas jugadas. Al contrario carece de ideas y a la hora de atacar no tiene en sus delanteros la solución para terminar con este mal momento. Hoy en descenso directo, con un partido menos y a 7 puntos de Tigre en la lucha por el promedio.
¿Hasta cuándo esta situación? Nadie sabe, pero lo que si esta a la vista es que el lobo no asusta y si bien recién van 6 fechas, esta lejos decir que peligra su estadía en primera. Lo que si preocupa es que dentro de 2 semanas enfrentará a Estudiantes. Lleno de dudas y de incertidumbres este equipo no entusiasma y si no quiere sufrir al final deberá cambiar y mucho el viernes en el bosque ante Huracán.
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