Del Potro ganó el primer set de la semifinal, pero luego el serbio mostró su jerarquía, recuperó terreno y avanzó firme hacia la final del Masters de Londres.
La final del último torneo del año ya tiene un jugador. Se trata de Novak Djokovic, número uno del mundo, que venció al tandilense Juan Martín del Potro por 4-6, 6-3 y 6-2. Cuando parecía que el triunfo se encaminaba para el séptimo mejor tenista de la actualidad, el europeo encontró su juego y terminó imponiéndose de manera contundente. Djokovic esperará por el suizo Roger Federer o el escocés Andy Murray, protagonistas de la segunda semifinal.
Las cosas no comenzaron muy cómodas para Del Potro, al ser trasladado por toda la cancha desde la precisa raqueta del serbio. Sin embargo aprovechó su servicio y clásica derecha para salir del peligro. Y después terminó de maniatar a su rival con potentes golpes, que le permitieron acabar el primer set con un gran nivel.
El segundo parcial arrancó similar al fin del primero. Pero cuando la "Torre" se hallaba 2-1 arriba, con un quiebre a su favor, Djokovic remontó la cuesta, tomó nuevamente el saque y dejó brillar la chapa del primer puesto mundial. Los 19 errores no forzados contra 9 del oponente también debilitaron el rendimiento del tandilense. Además el serbio obtuvo el 75 % de los puntos con su primer servicio y aumentó la cifra a 85 % en el set definitivo. Dos quiebres durante la tercera manga liquidaron la cuestión.
Del Potro llegaba a este encuentro tras superar a Federer y, anteriormente, al serbio Janko Tipsarevic. En su primera presentación había caído con el español David Ferrer. Por su parte Djokovic venía de ganar sus tres partidos del Grupo A, frente al checo Tomas Berdych, Murray y el francés Jo-Wilfried Tsonga. Con este triunfo el historial entre ambos quedó 7-2 en favor del serbio.
El año del tandilense se cerró con un récord de 65-17 junto a cuatro títulos, conseguidos en Marsella, Estoril, Viena y Basilea, este último ante el propio Federer. Además logró la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 (contra nada menos que Djokovic), éxito que estaba pendiente en la rama masculina individual del tenis argentino.
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