Días pasados se presentó en la ciudad de La Plata el ex delantero de la Selección Argentina
de fútbol campeona del mundo en México 86, Jorge Valdano con el fin de
desarrollar temas relacionados a la motivación y liderazgo, conferencia
organizada por el gobierno de la
Provincia de Buenos Aires que contó con la presencia del jefe
de Gabinetes de Ministros, Alberto Pérez y el Secretario de Deporte, Alejandro Rodríguez.
Con
la concurrencia de unas 200 personas entre ellas políticos, empresarios, representantes
de clubes, periodistas y público en general comenzó pasada las 19.20 horas la
conferencia, tuvo la palabra el licenciado Alberto Pérez quien agradeció la presencia
a Valdano y dijo en otras cosas “la política tiene muchas cosas en común con el
deporte porque también transmite valores”.
En
el comienzo, el periodista, escritor, ex directivo del Real Madrid entre otras
cosas, comenzó haciendo un prefacio de
lo que sería su charla sobre la motivación dentro de un grupo y el liderazgo.
El primer ejemplo que tomó, tiene que ver con lo importante que es un individuo
dentro de un equipo, y tomó de referente a Zidane en la final del mundial
Alemania 2006, que dejó a su selección con uno menos a falta de 20 minutos del
final del partido por el cabezazo al italiano Materazzi.
Luego
habló de estilos de liderazgo, y en este caso el modelo fue Pep Guardiola, técnico de Barcelona “Es
un hombre apasionado, lo que transmite es emoción, un hombre que ama al
Barcelona y el fútbol” “Guardiola nos pone una frase, un equipo es un estado de
ánimo”.
El
seleccionado italiano de 2006 que ganó el mundial de Alemania fue para Valdano,
un punto muy bajo en la rica historia de aquel país en el fútbol. Eran momentos
de desconfianza, de corrupción, de escándalos. Por eso hace mención a Marcelo
Lippi, entrenador de aquel equipo que hizo una virtud de algo que parecía el
ocaso. Usó la crisis institucional ante los jugadores y tratarlos de salvadores
del fútbol italiano. Algo que potenció el nivel de aquellos interpretes en el
verde césped para consagrarse.
El santafesino dijo, lo que es para el, las cosas que movilizan al estado
de ánimo. En primer lugar habló de la autogestión, en el caso de un futbolista
lo esencial, que coma bien, duerma bien, que se cuide. Dijo aquí de Ronaldinho “El entra al vestuario pone música y baila, mientras dice: somos jugadores del
Barcelona, jugamos en el mejor estadio del mundo, nos pagan una fortuna, la
gente nos adora” cuando termina de hablar terminamos bailando todos, los
catalanes que somos unos muertos, los holandeses que son fríos porque nos
trasmite las ganas de vivir y nos hace tomar conciencia del privilegio de ser
futbolistas”.
Otros
de los puntos que tocó fue el sentido de pertenencia, en este caso el modelo fue
Kaká que en una foto muestra con la camiseta brasileña. La representatividad es
enormemente importante. Cuando uno forma parte de una empresa, el mejor orgullo
es la relación directa con la cultura corporativa. La cultura es algo que
caracterizar cualquier proyecto colectivo, tiene que ser simple.
Y así prosiguió conversando sobre experiencias personales, como la llegada al Real Madrid a sus 28 años resultado se su propio esfuerzo, para luego hablar de las virtudes que hacen a una persona, en donde dejó la frase "el talento hay que potenciarlo".
En un momento tuvo un acto fallido y dijo Mourinho en vez de Ronaldhino. De todos modos es de la única forma que pronunció al hoy entrenador del Real Madrid que desde la llegada del portugués, Valdano se despidió de la Casa Blanca.
También disertó sobre el haber conseguido la Copa del mundo en 1986 y meter un gol en la final. De esto contaba que el haber errado un gol bajo el arco solo ante Bélgica en semifinales le sirvió para mejorarse así mismo y tener el apoyo de sus compañeros como Marcelo Trobbiani, quien fue a la habitación el día previo a la final con Alemania y lo invitó literalmente a simular el festejo del gol que iba a meter Valdano y que así fue.
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