Ángel Cappa repitió equipo y el lobo ganó. Es cierto no jugó bien, por instantes fue muy mediocre el juego, pero supo golpear al rival en el momento justo.
Como se esperaba el conjunto salió a presionar a la visita, los puntos eran indispensables por la lucha del promedio y la deuda con su hinchada terminó esta tarde noche. Los de Cappa intentaban por las bandas, Guillermo hacia jugar a la ofensiva con el aporte de Encina y muy poco de González. Los de Arruabarrena no se quedaban atrás, la diferencia la marcaba Román Martínez en el medio construyendo cada ataque del matador. Y los de Victoria abrieron el marcador. Denis Stracqualursi piboteó para Martínez que con un pase deja mano a mano a Morales que con una pegada suave anota el 1-0.
El segundo tiempo las cosas estaban parejas. Hubo una situación que cambió radicalmente el trámite del partido. Galmarini se la lleva con la cabeza en el área del lobo y define ante la salida de Sessa, el árbitro Germán Delfino de horrible labor, sanciona que el jugador se la lleva con la mano a instancia del línea y expulsa al volante de Tigre. A partir de este momento, Gimnasia mas relajado fue por la ventaja y llegaría en un desborde del chileno Rieloff que lanza un centro por abajo para la llegada de Neira (figura del cotejo) y la manda adentro para sentenciar el resultado. Hubo unas cuantas acciones que el juez de la jornada no advirtió y es por ello que su actuación no fue la esperada.
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